Como ya te avancé el otro día, finalmente me decidí a hacer un curso para perder el miedo a volar. Mis frecuentes viajes y la necesidad de tener que coger aviones me estaba haciendo disfrutar un poco menos de lo debido (bastante menos) de los trayectos. Y eso no podía ser.
Así que apareció la oportunidad y la aproveché. Ya te contaré los detalles, aunque no esperes que te cuente cómo perder el miedo a volar. Eso sólo te lo pueden explicar profesionales en este tema. Lo que te contaré es como transcurre el curso y lo que se hace para controlar y relajar esa imaginación desbordante que tenemos los que solemos controlar más de lo debido. La verdad es que lo pasamos bien a pesar de los muchos nervios e inseguridades que todos teníamos. Si es tu caso, es una inversión que vale la pena hacer.
Te dejo un avance del curso, a modo de trailer. En unos días te iré contando más cosas.
Sigue leyendo cómo descubrimos que teníamos una imaginación desbodante.
(c) Fotografía: Jim Abrahams
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