El transmongoliano no es un tren -aunque pueda parecerlo- sino el nombre que recibe la línea ferroviaria que va desde Pekín (China) a Moscú y San Petersburgo en Rusia. Para los amantes del ferrocarril, el transmongoliano es quizá una de las líneas ferroviaras más atractivas. El romanticismo del tren se une a la aventura de atravesar tres culturas bien diferentes.
En realidad, la línea férrea se compone de tres ramales. El transiberiano (a través de Rusia), el transmanchuriano (a través de China) y el transmongoliano.
Esta última es la que atraviesa Mongolia, el país de las familias nómadas, los caballos y las estepas. Un viaje fascinante de más de 10.000km que inicié en Pekín por aquello de llevar la contraria ya que la mayoría de gente hace el recorrido a la inversa. Un viaje en tren lleno de anécdotas, emociones y experiencias inolvildables. Las etapas las decides tú, la comodidad con la que viajas en los trenes también y el tiempo que le dedicas a cada parada, también.
Hacer la ruta transmongoliana te permite vivir un sinfín de experiencias a través de China, Mongolia y Rusia. Cada país con sus peculiaridades, su cultura e inquietudes. Pekín caótico y distante para el turista tiene muchos atractivos. Sin duda alguna, la gran muralla china es uno de ellos, pero hay mucho más.
Pero es Mongolia -sin duda alguna- el país que más atractivo ofrece. La inmensa estepa, sus interminables llanuras están presentes desde que el tren atraviesa la frontera china. Las planicies verdes juegan con las suaves y largas curvas del tren que al atardecer ofrecen un espectáculo visual incomparable.
Deternese es Ulaan Bator es la mejor de las ideas. Capital de Mongolia que apenas tiene interés para el visitante, es el punto de partida para conocer el país. No es tarea sencilla encontrar el operador turístco que ofrezca buenos tours por el país (quizá la manera más sencilla de conocerlo) pero los hay. Los hostel de la ciudad (no todos) ofrecen algunas variedades. La mejor (la que elegí) el tour semi libre con las familias nómadas.
5 días de familia en familia en solitario. Cada familia te muestra su forma de vida, sus quehaceres diarios. Por la tarde, se encargan de llevarte a la familia del día siguiente con los medios que tengan disponibles. Ya sea un caballo, una moto o un camello. Sin duda una experiencia inolvidable. Recorrer Mongolia por libre también es una opción, pero no es tarea sencilla.
Rusia es harina de otro costal, pero no menos interesante. Imprescindible hacer parada en la idílica Litsvyanka a orillas del lago Baikal y degustar su impresionante pescado ahumado. Conocer Krasnoyarsk y encontrar a alguien que te lleve a conocer la vida tradicional en un pueblo siberiano, conocer la gastronomía y su cultura popular.
A Moscú hay que darle de comer a parte. Sus habitantes no se caracterizan precisamente por su amabilidad. Pero sus monumentos, perderse por las majestuosas estaciones del metro de la ciudad y su gastronomía, bien valen la pena un sofoco con el impresentable de turno. De ahí, a San Petersburgo, la cara opuesta a Moscú. Adornada con una mágnífica arquitectura y mucho más cosmopolita y abierta que la capital, es también para perderse unos cuantos días. Los amantes del arte, además podrán disfrutar del Museo del Hermitage. Un hormiguero de turistas con más fama que calidad que no hay que perderse.
En definitiva, el transmongoliano es una ruta intensa, llena de contrastes y experiencias imprescindible para los amantes del ferrocarril. Pasarse 14 ó 36 horas en según qué trayectos de tren acaban por no importar, porque la vida en el tren sigue y está llena de inesperados encuentros y conversaciones.
En mi opinión, la ruta transmongoliana es la que ofrece más matices y puntos de interés. Atravesar los tres países así lo garantizan. Dónde y cuánto tiempo te detienes en cada lugar ya es cosa tuya. Yo hice el recorrido en 30 días, saltando en avión entre Krasnoyarsk y Moscú para poder estarme más tiempo de lo debido en Pekín, Litsvyanka y San Petersburgo.
Todas estas cosas y muchas otras más son las que hice en mi ruta transmongoliana. Aquí tienes todos los artículos publicados sobre este viaje.
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2 comentarios
Hola!!
me podrías decir con quien hiciste el tour de Mongolia, estoy interesado en hacer algún parecido de 4 o 5 días y no lo encuentro.
Muchas gracias, un saludo
¡Hola!
No he hecho este viaje, pero sí que me recorrí China en tren. ¡Vaya experiencia! Uno de los trayectos fue desde Beijing hasta Lhasa, en el Tíbet, durante 44 horas seguidas. Es algo indescriptible para quien no lo ha vivido.
Os mando un abrazo.
Syd, de Quiero ser libre