Día 24 y 25 Yakarta y la sorpresa du jour
El viaje está llegando a su fin, pero aún me quedan un par de días en Yakarta. He tenido un buen vuelo desde Lombok. He cogido un taxi y he descubierto lo que es el tráfico en esta ciudad. El atasco es monumental, sí, aunque no sé si tanto porque comparado con Caracas… Es igual, no tengo prisa ninguna.
El plan es estar en Yakarta tranquilo un par de días para ir asumiendo la vuelta a casa. Siento muy presente el relax de los días anteriores y voy un tanto despreocupado de todo. Sé que tengo el vuelo el día 26 por la noche así que no tengo por qué preocuparme. Me he buscado un buen hotel, lejos de algunas de las precariedades de las semanas anteriores. Tengo que ir acostumbrando el cuerpo a la vida de cada día, que luego el choque cultural se nota. Es más la excusa que otra cosa, lo sé. Hotelazo y punto.
Una vez instalado ya es tarde para ir a hacer turismo, así que descanso un poco y ceno en un restaurante de por aquí cerca.
Al día siguiente me dedico a deambular por el centro de Yakarta sin demasiado rumbo. El que iba a ser mi guía en la ciudad me ha fallado y al final he tenido que ir por libre. Vamos que con perderme por ahí me sirve.
Pruebo el transporte público de la ciudad, el Transjakarta. Es la mejor opción para evitar los atascos del centro. Es una infraestructura curiosa que se hizo tras el fiasco de intentar montar un skytrain -uno de los escándalos de corrupción más sonados. Hay que tener cuidado con los huecos que quedan entre los andenes y los autobuses. Tampoco me ha pasado desapercibida la señalización de advertencia sobre lo que no se puedes hacer en los autobuses.
Por la noche, como yo soy muy previsor -más bien es que si no vuelo en pasillo no voy tranquilo- he hecho el checkin online del vuelo de vuelta. Pero he cambiado de opinión sobre el asiento elegido y lo he anulado para cambiar mi sitio. Deshacer un check in online no es inmediato así que mientras me avisaban para poder volver a hacerlo, ahí lo he dejado y me he ido a tomar una copa. He ido al Menara BCA -cerca del hotel- un edificio muy alto que tiene un skybar con unas vistas muy interesantes de Jakarta.
Las vistas bien, pero la terraza muy mal iluminada y desorganizada. La piel de vaca en la decoración del restaurante tampoco me ha cautivado, pero es mi última noche en la ciudad -eso creía yo- y no me voy a poner a valorar el gusto del decorador del chiringuito.
Con el Maithai aun presente y el gusto de volver al hotel en un taxi Silver Bird Mercedes -la versión deluxe de los taxis blue bird normales- he intentado rehacer el checkin de mi vuelo de vuelta. Relleno los datos de acceso, le doy al botón para entrar y… ¡Zas, en toda la boca! Todavía recuerdo esa sensación de caída libre, de incredulidad que tuve, cuando leí en la pantalla del ordenador este mensaje:
Lo sentimos mucho, pero no puede hacer check-in porque su vuelo ya ha despegado.
¿Cómo? ¿Qué? ¡yo vuelo el 26 por la noche! el 26 por la no...-aquí hago una pausa dramática para enfatizar el momento tan absurdo en el que me encuentraba- che. Pues eso, mi vuelo era el día 26 sí… a las 00:10h. o lo que es lo mismo, la noche del 25 al 26 muy de madrugada. Es la primera vez que me pasa, te lo aseguro. Me llamo José David y he perdido un vuelo. Ale, ya lo he dicho.
No podía enfadarme con nadie y enfadarme conmigo no era plan. Ya no tenía remedio. Eran casi las dos de la mañana y no tenía forma de volver a Barcelona. ¿Sería una señal para que me quedara? No creo.
Lo peor de todo era que en dos días tenía que estar trabajando en la oficina de Barcelona. Encontrar un billete libre a finales de Agosto, iba a ser difícil. No pude hacer otra cosa que acostarme intentando no pensar demasiado en ello. Por la mañana iría a las planta 38 de la torre BCA -anecdóticamente en el mismo edificio donde me encontraba mientras mi vuelo despegaba sin mí- para intentar que Qatar Airways hiciera un acto benéfico conmigo y me cambiara sin más, la fecha de mi billete.
Día 26 – Bonus track en Yakarta.
Apenas he desayunado porque ando nervioso con el tema del billete. Me voy pronto a la BCA para solucionarlo cuanto antes.
El personal de Qatar Airways, puntuales y solícitos me han atendido muy bien a las 9 en punto. Tras poner la mejor de mis caras de apuro y explicarle a la señorita la situación, me ha traspasado a su compañero para que me solucionara el tema. Por un momento pensaba que harían el cambio de fecha, para hoy mismo, pagaría una pequeño cargo por la gestión y ya. Pues no. No hay plazas en clase económica hasta dentro de diez días. A lo Pero ¡Yo tengo que volar hoy! -hágase la traducción al inglés con el dramatismo necesario.
He buscado en otras compañías aéreas -no es la primera vez que me salva llevar conexión a internet en el movil y la tablet- y compruebo que todas tienen precios de más de 3.500€. No me ha quedado otra que acabar comprando uno de los tres billete que le quedaban a Qatar Airways en clase business para esa misma noche.
Las tarjetas de crédito y débito me han vuelto a hacer sudar- como ya lo hicieron intentando registrarme en el Hotel Marina Bay Sands de Singapur– Tras unos 10 intentos para pagar el billete con mis tarjetas, jugando con los límites desde el banco online, lo he conseguido. Pobres, no están acostumbradas a esos sablazos.
Me he gastado en el billete casi lo mismo que me he gastado durante todo el mes viajando. Eso sí: voy a volver a casa como un rey. Tras el mal trago de saquear mis propios ahorros, me voy a patear la ciudad. Tengo un día extra en la ciudad y hay que aprovecharlo.
En Yakarta se celebra el 67 aniversario de la independencia de Indonesia y han hecho una carrera popular. en la llegada -junto al Nasional Monumen- me cruzo con mucha gente, un concierto, calor y mucha basura. ¿Porqué esa manía de tirarlo todo al suelo para luego tener que recogerlo? Cosas de Asia.
He recorrido parte del barrio antiguo de la ciudad: el barrio portugués. La plaza del ayuntamiento, el café Batavia -Batavia es el antiguo nombre de la ciudad- y los mercadillos cercanos al puerto han sido mi entretenimiento.
He descubierto una granja de pollos y una carniceria juntas, en una especie de granja-mercado-vecindario, donde lo más impactante son las condiciones higiénicas. Por suerte, ha sido antes de comer. Los pollos -algunos de ellos muertos- y la carne de la carnicería justo al lado, sin nigún tipo de higiene, no ha sido una visión muy agradable. Suerte ha sido el último día.
La parte de Yakarta por la que me he podido mover es ruidosa, bastante sucia y llena de socabones en los que podrías caber entero, pero no me ha disgustado. Como dice el amigo @Kaldorana del blog Jakartaymas, es una ciudad para vivirla, perderse y descubrirla.
Recorrerse la ciudad en bajaj -tuk tuk-, es toda una aventura. No todos los conductores se conocen todos los sitios, ni se pueden comunicar contigo en inglés. Además tienen las zonas de circulación limitadas. Así que he tenido que hacer de guía del conductor a golpe de gps y gestos mientras él iba sorteando motos y coches como si estuviésemos persiguiendo a los malos. Nos hemos confundido unas cuantas veces, pero nos hemos llegado a nuestro destino y nos hemos echado unas risas. Le he dado una buena propina porque se lo ha ganado.
Ya por la tarde, esta vez con el horario controlado, he recogido mis cosas y me he ido al aeropuerto. He ido con mis mejores galas, porque no es plan ir en business y estar en las salas de espera business hecho un pordiosero. Iba yendo al aeropuerto en taxi -una chica la mar de maja, y única taxista con la que me he cruzado en todo el viaje- mientras me quedo con las últimas luces de Yakarta y he recordado muchos de los momentos que he disfrutado en este viaje.
La vuelta a casa en clase business es digno de recordar. Ya te contaré la experiencia con más detalle.
Una vez en casa, he echado cuentas de fechas y horas y con todo el follón he descubierto que en realidad no empiezo a trabajar mañana, sino que tengo un día más de vacacones. ¡Bendito sea un día extra de vacaciones!
3 comentarios
Muchas gracias por la mención.Creía que eras mi amigo y que no ibas a hablar mal de mi Jakarta…pienso que te has pasado.
Fotos excelentes ¿porque a mi no me salen igual?.
Un abrazo desde…Jakarta
Hola te acabo de descubrir. Genial tu diario de viaje, para mí este tipo de información me parece igual de útil que las guías de viajes. Aunque me hubiera gustado un post final con un resumen de impresiones y recomendaciones. Yo estoy mirando un viaje para una luna de miel en Septiembre y dudo mucho entre Indonesia y Tailandia. Alguna recomendación?
Gracias y tienes una seguidora nueva :)
Hola Indexita, gracias y me alegro te haya gustado. Escribiré un post con impresiones y recomendaciones. Aun queda mucho por publicar. Ambos países son parecidos, pero depende de por donde te quieras mover, quizá mejor Tailandia. Indonesia para una luna de miel? Pues porqué no? depende de lo que te guste perderte fuera de los cotos de turistas… Tailandia quizá más sencillo para moverte…Si quieres naturaleza, en ambos hay grandes lugares.