Chiang Mai está situada al norte de Tailandia. Relativamente cerca de los países vecinos de Myanmar y Laos. Es un buen punto para establecer el campamento base y hacer escapadas  en áreas muy intersantes, tanto de Tailandia (como Chiang Rai) como en los otros dos países. Las posibilidades son enormes.

Tailandia

Una de las cuatro puertas de entrada a la ciudad antigua de Chiang Mai.

Para llegar a Chiang Mai, tienes varias opciones. La más rápida y cara, es coger un avión desde Bangkok (aeropuerto internacional de Suvarnabhumi). El vuelo apenas dura una hora y cuarto y hay varias compañías que ofrecen vuelos asequibles. La más conocida, Air Asia, pero también Bangkok Airways y similares, cubren esta ruta. Sin duda es una opción rápida, pero que no te permite disfrutar del trayecto, del paisaje y de su gente. Por ello, te recomiendo que al menos, o la ida hasta Chiang Mai, o la vuelta desde Chiang Mai hasta Bangkok, la hagas en tren. En mi caso es lo que hice para iniciar mi ruta por Tailandia: volar de Bangkok a Chiang Mai para luego recorrer el país hacia el sur en tren. Una delicia.

Entrada de la estación de ferrocarril.

Pues vale, ya has llegado a Chiang Mai. Tanto si lo haces por tren o desde el aeropuerto, tienes que desplazarte hasta la ciudad antigua, lugar donde creo es mejor hospedarse, por su hubicación y su ambiente. La estación de tren no está lejos de la ciudad antigua, como a unos 15 minutos andando. Si es demasiado para tus cansados pies de mochilero, puedes coger un taxi en la misma estación, no suelen salir caros, pero exige el taxímetro para evitar sorpresas y no tener que regatear el precio.

En el caso del aeropuerto, ya estás más lejos de la ciudad. En alguna guía de renombre, se hace mención a un supuesto autobús número 6 que sale desde el aeropuerto hasta la ciudad. La verdad es que yo estuve preguntando, y nadie conoce de la existencia de este autobús.  Y es que cuentan que hace años, se montó un sistema de autobuses públicos para desplazarse, pero que se desmontó poco después. El caso es que no hay ni rastro del susodicho autobús, que debería ser el último superviviente de esta red pública de transporte. Lo mejor que puedes hacer, es coger un taxi o un tuk tuk. He podido comprobar, en muchos sitios de Tailandia que las conexiones de los aeropuertos o estaciones de tren quedan limitadas a las mototaxis, los tuk tuk y los propios taxis.

Mi primera visión desde un tuk tuk de camino hacia la ciudad antigua.

Yo cogí un tuk tuk, porque era la primera vez y me apetecía probarlo.  Empezaba a llover y todavía tenía que encontrar guesthouse para los próximos días…